miércoles, 1 de septiembre de 2010

Investigación esperanzadora


pagina de la fundación

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Investigación esperanzadora
- ÍÑIGO NORIEGA, DIRECTOR DE EL COMERCIO

La publicación en la revista científica 'In vivo' de los trabajos que la Unidad de Investigación de la Fundación Hospital de Jove y la empresa de biotecnología Projech han llevado a cabo durante los últimos tres años, presentada en días pasados en el marco de la Feria de Muestras de Asturias, representa la confirmación del descubrimiento llevado a cabo por el equipo científico, que de forma muy sucinta consiste en localización de las células madre del miometrio -que se encuentran en el útero de mujeres en edad fértil- y de la identificación en ellas de propiedades curativas.
La responsable del proyecto, la Fundación para la Investigación de Células Madre Uterinas (Ficemu), presidida por Pedro Barbillo, considera que la ratificación y difusión del hallazgo pone a disposición de la comunidad científica el avance que podría llegar a permitir la curación de numerosas dolencias. Los trabajos, tal como informó EL COMERCIO en octubre del año pasado, parten de la identificación de las células madre uterinas y de su utilidad, según los promotores de la investigación, en el tratamiento de determinadas enfermedades crónicas, autoinmunes y degenerativas que conlleven inflamación o pérdida de tejidos: alzheimer, párkinson, esclerosis, artrosis, crohn, infartos, artritis,... son sólo algunas, las más sonoras, de entre las que los investigadores barajan.
La enumeración da idea de las enormes esperanzas que pueden llegar a despertarse y, por tanto, de la responsabilidad que implica dar a conocer un descubrimiento de este calibre, que ha superado ya la fase que determina las posibilidades terapéuticas y ha iniciado los ensayos en animales, concretamente en la capacidad de regenerar masa muscular en ratones, en la que ha obtenido resultados satisfactorios, según afirma Francisco Vizoso, el jefe del equipo investigador. Hay todavía un largo camino por delante, en más dolencias concretas y, sobre todo, en la experimentación en humanos, pero la previsión es la de tener en uso fármacos a la vuelta de cuatro años. La comprensible expectación abierta llevó a prevenir al consejero de Salud del Principado, Ramón Quirós, de que se crearan «expectativas irreales» entre los afectados por algunas de las dolencias mencionadas. De hecho, la Administración ha declinado, por el momento, participar en la financiación del proyecto.
Si la investigación que la Fundación del Hospital de Jove y Projech llevan a cabo sobre las propiedades curativas de las células madre uterinas tiene visos de obtener resultados viables, como aparenta, la Administración debería apoyarla sin ambages, como le competería denunciarlo en el caso de que se considerara que no responde a criterios solventes. Se trata de un sector con enorme futuro y posibilidades, por lo que el hecho de contar con equipos humanos experimentados en biotecnología representa una inversión en conocimiento nada desdeñable.
No se puede dejar una iniciativa de este tipo pendiente de una bienintencionada pero inapropiada obtención de recursos, como los pequeños donativos o los sorteos benéficos; ni de que avance a ritmo más lento del que podría llevar; o de la posibilidad de que las patentes se encarezcan o queden bloqueadas en manos de inversores que pretendan la legítima rentabilidad que les correspondiera. Ni la obligada racionalización del gasto público puede servir de disculpa. Instituciones emergentes, como el nuevo Hospital Universitario Central de Asturias, que aspira a centralizar y liderar la sanidad pública regional, o la proyectada sección dedicada a Biomedicina del campus de la excelencia de la Universidad de Oviedo, son candidatas a colaborar en este u otros proyectos similares que enlazan con las aspiraciones de desarrollo pretendidas para nuestra comunidad
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fuente:el comerciodigital.com

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